jueves, 16 de diciembre de 2010

Castañeda Quispe

A Elisabeth,  la viuda de Castañeda Quispe, muerto la semana pasado en el parque indoamericano, además de los planes de vivienda,  no piensa el gobierno de la cuidad  ponerse a su disposíción para cubrir las necesidades inmediatas que con  sus tres hijiitos tiene?.  Además, el parque no debería llevar el nombre de los tres muertos, producto  del accionar policial y de la ineficiencia de Maurizio Macri ?

sábado, 27 de noviembre de 2010

ya un mes

Que tristeza. Aún no hay consuelo por la pérdida de Néstor. ¡Que mala leche! como dijo en un reportaje el otro día Fontova . Y bronca tambien ,porque habiendo tantos motivos para festejar, el prinicipal generador de tantos cambios, quedó fuera del festejo.

lunes, 1 de noviembre de 2010

No nos rodean. Nosotros los vigilamos




Vivimos entre ellos, sí vivimos entre los miserables que el miércoles 27 de octubre brindaron. Así lo ha querido la fatalidad geográfica.
Pero nos gusta pensar más bien que estamos infiltrados entre ellos. Parafraseando a Martí, “convivimos con el monstruo y le conocemos las entrañas”. Ese contacto cotidiano con la mierda, lejos de contaminarnos nos permite apreciar más el aire puro cuando llega indetenible.
Y desde la tarde del miércoles lo que comenzó siendo una fresca brisa se convirtió en incesante vendaval patagónico que arrasó con la podredumbre, al menos momentáneamente. Al menos nos permitió el alivio de rumiar la tristeza y recomponer ideas.
Entonces dijimos, qué podemos hacer. Qué carajo podemos hacer aquellos que no hemos tenido consecuencia en la militancia, o tal vez nunca militamos. Que venimos de hogares gorilas, pero siempre sospechamos de esos prejuicios que nos inculcaban. Que no leemos Clarín ni La Nación como práctica, sino a veces para verificar que los hijos de puta existen y no dejan de serlo. Que hoy sólo escuchamos radio Nacional pero como un refugio y no nos da para participar o salir al aire porque sabemos que algún otro saldrá por nosotros y lo dirá mejor.
Y aquí estamos, tímidamente asomando la cabeza, porque eso sí, nos hemos dado cuenta de que es ahora o nunca. No importa la edad ni la condición social ni la historia previa, ni si tu vecino o tu empleador te miran con mala cara. Ahora o nunca, loco. Hay que defender este proyecto aunque compres en el Unicenter. Si esto se cae, no vas a poder hacerlo más.
Acá te hacemos un rinconcito para que dejes de lado tu proverbial sentido del ridículo y te sumes con tus opiniones, iniciativas y sugerencias a esta cruzada de un grupo de infiltrados en la Zona Norte que tiene ganas de demostrarles a los miserables que brindaron, que pronto se les va a atragantar el champán.
Acordate, es ahora o nunca

G5 Zona Norte

Nuestra Despedida a Néstor